Ya seas varón o mujer, heterosexual u homosexual, necesitas recibir amor divino femenino así como experimentar tu propia naturaleza amorosa femenina interna. Actualmente está bastante aceptado que todas las personas tienen un varón interior, o ánimus, y una hembra interior, o ánima, independientemente del sexo físico. Estas partes de ti mismo deben ofrecer un aspecto saludable y equilibrado a fin de generar salud, equilibrio y creatividad en tu vida.
Para abrirte al amor divino femenino debes utilizar la cualidad receptiva de tu naturaleza femenina a fin de permitir que el amor o cualquier otra cosa venga a ti. La cualidad de sentimientos y naturaleza vibratoria de cada sexo es única y maravillosa. El propósito de esta cámara es abrirte a la energía y sentimientos específicos del amor femenino en su forma suprema.
Si has tenido relaciones dolorosas con tu madre, tus amigas o tus amantes o parejas femeninas, esta cámara te proporcionará una intensa sanación interna, así como de las relaciones mismas. Si has tenido relaciones positivas y satisfactorias con mujeres, esta sesión de cámara te hará dar un paso más hacia el fin de cualquier sensación que tengas de separación de la Diosa Madre y te ayudará a abrirte para que te acerques al ser Uno, al cuidado de los demás y al amor femenino.
Antes de empezar la sesión me gustaría mencionar unos pocos seres femeninos de luz que puedas invocar.
Quan Yin (cuyo nombre también se escribe Kwan Yin, Kuan Yin y Kanseon) vivió en la Tierra y recibió la iluminación mucho antes de los tiempos de Gautama el Buda. Se la venera en casi todas las prácticas budistas como guardiana de la Compasión Divina y Madre del Mundo. Su naturaleza extremadamente gentil y confortadora dan la paz; a menudo se la representa con tigres o dragones domados por su dulzura y compasión.
La Madre María fue una sacerdotisa iluminada y la madre de Jesucristo. Ella, junto con un gran número de mujeres que recibieron la iluminación antes de, o como resultado de conocer a Cristo, forman un grupo llamado de Hermanas del Rayo del Cristo Ascendido. María Magdalena, Marta, Santa Ana -que era la madre de la Madre María-Ruth, Raquel, Elisabeth, Sara, Judit, y muchas más actúan juntas como un colectivo de iluminación femenina y de conciencia de Cristo. También desempeñan papeles individuales como guías y Maestras Ascendidas de humanos. Yo siempre invoco a este grupo cuando realizo cualquier tipo de sanación femenina.
Otras a las que podrías llamar son: Isis; Shakti, cuyo homólogo divino es Lord Shiva; Radha, cuyo homólogo divino es Krishna; Kali, la destructora del ego y de todo lo que es falso, una diosa «mala por amor»; la Mujer del Cachorro de Búfalo Blanco; Tara; Deodata, cuyo homólogo divino es Gautama el Buda; cualquiera de los arcángeles femeninos; Santa Catalina; Santa Bernadette; Santa Juana de Arco; o cualquier otra santa o deidad femenina con quien sientas una afinidad particular o con quien desees establecerla.
Cuando estés listo para empezar la sesión, sigue los mismos pasos dados para la Cámara de Configuración de Amor Angélica y Arcangélica. Sin embargo, realiza éste como paso 11:
- Relájate en posición reclinada, con las rodillas apoyadas sobre algo cómodo (cuando las piernas están completamente rectas, las rodillas tienden a bloquear e inhibir el flujo completo de energía).
- Cuando te encuentres en posición, inspira despacio unas cuantas veces mientras centras la atención en lograr que tu conciencia esté más presente en el cuerpo.
- Conéctate a la tierra.
- Retrae el aura a una distancia de aproximadamente un metro del cuerpo en todas las direcciones. Haz los cambios necesarios en el color de los límites del aura o en las rosas.
- Ahora llama a los Emisarios Pleyadianos de Luz y al Maestro Ascendido Jesucristo para vigilar y llevar a efecto la sesión de sanación.
- Pídeles que coloquen sobre ti el Cono de Luz Interdimensional para procurar el despejamiento y el alineamiento divino.
- Si deseas que otros guías, seres angélicos o Maestros Ascendidos estén presentes en la sesión, ahora es el momento de llamarlos, especificando siempre que sólo los seres de Luz Divina estén presentes.
- Como en cualquier otra sesión de sanación, pide qué te acompañe tu Yo Superior.
- Ahora estás preparado para invocar la sesión de Cámara de Luz específica que desees recibir. Las instrucciones se encuentran en las secciones individuales de cada cámara.
- Pide que la Cámara de Luz de Configuración de Amor de Unificación aparezca alrededor de tu aura y tu cuerpo.
- Visualiza el Sol que brilla en la habitación y sobre la parte anterior de tu cuerpo (sobre ti, ya que estarás tumbado).
- Pide que el Sol se utilice como fuente del Amor de Dios Padre hacia ti.
- Siente los finos rayos de luz de amor entrando en tu aura por la parte anterior del cuerpo desde la cabeza a los pies. Acéptala mediante la respiración hasta que fluya por detrás de tu cuerpo hacia la Tierra.
- Pide que la Luz de Amor de Dios Padre siga fluyendo a través de ti hasta que acabe la sesión.
- Ahora llama a la Madre Tierra para que sea vehículo del amor de la Madre Diosa o Santa Madre.
- Visualiza corrientes finas de luz de amor que fluyan desde la tierra hacia la parte posterior de tu cuerpo (debajo de ti, ya que estarás tumbado) y acéptalas a través de la respiración. Continúa este proceso hasta que sientas que la luz de amor rebosa por la parte anterior de tu cuerpo y te llena el aura.
- Pide que esta luz de amor siga fluyendo a través de cada célula de tu cuerpo hasta que termine la sesión.
- Pide a los Emisarios Pleyadianos de Luz y al Maestro Ascendido Jesucristo que te llenen de su amor.
- Invoca a cualquier guía, Maestro Ascendido, ángel, arcángel o cualquier otro Ser de Luz que quieras que se una al círculo de la Cámara de Configuración de Amor que te rodea.
- Invoca a cualquier guía femenina, Maestra Ascendida y Ser de Luz que desees que esté presente. Si no deseas invocar a seres específicos, utiliza simplemente la invocación siguiente: «Invoco a las Hermanas del Rayo del Cristo Ascendido y a todos los ángeles, arcángeles, maestros y guías femeninos que sean de Luz y amor Divinos. Rodeadme y llenadme de vuestro amor divino femenino para que vuelva a reunirme completamente con la Santa Madre Diosa». Si necesitas sanar relaciones concretas con mujeres, es el momento de decirlo.
- Permanece tan abierto y receptivo como puedas en este momento. Deja que el amor fluya a través de cada célula de tu cuerpo desde todas las direcciones a la vez. Si necesitas más ayuda para abrirte y relajarte, repite la afirmación siguiente hasta que te sientas relajado y más abierto: «Merezco amor divino y estoy dispuesto a recibir amor divino ahora».
- Cuando sientas que la sesión llega a su fin y los Seres de Luz se alejan, despídete de ellos de un modo que te resulte natural. Por ejemplo, di: «Narraste», o expresa tu gratitud.
- Abre los ojos y vuelve despacio a la habitación, llevando el sentimiento de la sesión de cámara a tu vida diaria. Vuelve a conectarte a la tierra si es necesario.